El Ayuntamiento de Illana ha hecho balance de los servicios que se han prestado desde el inicio del estado de alarma y que pusieron en marcha con el objetivo de atender especialmente a todos los mayores que, por ser personas de riesgo, debían evitar salir de sus casas salvo que fuese estrictamente necesario. Destacan que, aunque ponen fin a estos servicios por el avance del proceso de desescalada, continuarán prestando especial atención a aquellas personas que la requieran.
Fue el 16 de marzo, tan sólo dos días después de la declaración del estado de alarma por el Gobierno de España, cuando desde el Consistorio pusieron en marcha la prestación de atención telefónica para conocer el estado y necesidades de los vecinos de edad más avanzada para ayudarles en cualquier cuestión que requiriesen.
El alcalde de la localidad, Francisco Javier Pérez del Saz, ha puesto en valor este servicio que, desde su inicio, ha atendido un volumen superior a las 200 llamadas telefónicas semanales. “Gracias a la magnífica labor de la trabajadora municipal de asuntos sociales, los mayores han estado en todo momento atendidos y han agradecido enormemente la compañía y el cariño que ella les proporcionaba con sus llamadas periódicas”.
Además, desde un primer momento, sacaron adelante un servicio de reparto de pedidos bajo demanda que ha entregado más de 600 paquetes de productos de toda índole. Gracias en buena medida a la atención telefónica anterior, los usuarios solicitaban los alimentos o medicinas que necesitaban y el personal al servicio del Consistorio encargaba dichos productos a los comercios locales y repartía los pedidos los martes y viernes de cada semana tanto en el núcleo urbano como en las tres urbanizaciones.
Rafael Alonso, concejal responsable de Asuntos Sociales, era el encargado de coordinar la planificación de los repartos. El edil ha remarcado la labor de todos los empleados municipales que se han implicado en los repartos, así como trabajadores de las urbanizaciones y el papel de los comercios del municipio. “Ha sido un servicio que se ha convertido en algo fundamental para muchos mayores que seguían las recomendaciones de quedarse en casa y necesitaban que alguien les echase una mano”. Además, afirma Alonso que “muchos de ellos, que pasaban los días sin ver a nadie, agradecían enormemente los minutos que pasábamos en la puerta de su casa charlando con ellos los días que repartíamos los pedidos”.
En el Ayuntamiento están satisfechos por la percepción de los vecinos y valoran el factor humano que ha supuesto la experiencia de estos meses, destacando que se ha demostrado cómo las administraciones deben ponerse al servicio de los vecinos, especialmente en momentos como el actual. “Hemos tratado de ponernos a disposición de ellos con cercanía y voluntad de servicio”, a pesar de que la situación era en ocasiones extremadamente difícil y había desánimo “hemos podido compartir una experiencia humana con los vecinos que recibían los servicios, que no cabe duda que va a dejar marca en todos nosotros” ha concluido Alonso.
Las cifras totales de servicios prestados
Una vez hecho el recuento total de las cifras, las llamadas telefónicas atendidas con los vecinos más mayores han ascendido a la cantidad de 2.490 conversaciones, que se han desarrollado en la mayor parte de la emergencia, al menos, dos veces a la semana.
Respecto a los servicios de entrega de productos bajo demanda que se han desarrollado, se han entregado un total de 359 pedidos de productos básicos, fundamentalmente alimentos y productos de limpieza o higiene, 149 entregas de medicinas y productos de farmacia y 70 servicios de otra índole, entre los que pueden destacarse gestiones bancarias o administrativas y entregas de material de papelería o socio-sanitario.
Además, los más pequeños también han recibido un total de 35 entregas de material escolar para completar sus tareas académicas y se han amenizado 6 cumpleaños haciendo sonar las sirenas de los coches municipales y llevando a los chavales un pequeño obsequio.
Por otro lado, desde el Ayuntamiento se han repartido puerta por puerta una cantidad superior a 1.700 mascarillas de protección, 900 de ellas FFP2, y se han llevado a cabo 16 desinfecciones de puntos de especial interés, como pueden ser accesos a comercios o instalaciones sanitarias, puntos de recogida de residuos o vías públicas en general.